Es hijo de otra época, o eso le gusta pensar a él, aunque se desenvuelve bien en el mundo que le ha tocado vivir. Simmon Said (Madrid, 1983) es un romántico como los de antes pero con la practicidad de los de ahora. Fue en 2009, cuando a modo de epifanía, ante 'La Planchadora' de Picasso del Guggenheim de Nueva York, entendió cuál era su camino. Después de haber coqueteado con diferentes disciplinas artísticas, dejó una novela a medio escribir en el cajón y volvió a sus lápices de siempre.

Es un ilustrador que disfruta revisitando referentes estéticos del siglo XX, desde la cartelería soviética hasta los trabajos secesionistas, pasando por las fotografías en blanco y negro de la revista Life. Lo dicho, un nostálgico, pero con buen rollo y buen pelo.

Se ha ido formando poco a poco, hasta encontrar un estilo personal consiguiendo que se reconozca al momento su inconfundible sello de sensibilidad retro. Destaca su trabajo en el mundo editorial, como colaborador de Condé Nast ilustrando para Condé Nast Traveler y GQ, entre otros. Además de trabajos con Cadena Ser, Museo Thyssen-Bornemisza, Mulafest e IFEMA, donde expone un mural de manera permanente. Clientes como Sephora, Shiseido, Kimko, Tommy Hilfiger y Netflix han contado con él para sus campañas publicitarias. Está muy orgulloso de sus colaboraciones internacionales con el mundo del teatro como fondo, realizando los carteles de las obras 'Angeleta & Etelvina' en el Little Angel Theatre de Londres (Reino Unido) y 'El Viajero' en el Royal Culture Center de Amán (Jordania). Además, como tantos artistas de Gunter Gallery, la música ha sido clave en su carrera, y ha creado junto al grupo Los Nastys la portada de su primer disco.

@simmonsaid