Decía Bob Dylan que "Las canciones son pensamientos que por un momento paran el tiempo. Escuchar una canción es escuchar pensamientos". Y entender la música del genio es estar conectado con la poesía y con el alma. Como cualquier artista, Bob Dylan nunca pensó que su canción ‘Blowin’ in the Wind’ llegaría a ser más que un himno, incluso para generaciones que nacieron décadas después de su lanzamiento en 1963. Una canción protesta que busca explicaciones a los conflictos armados, pues “la respuesta, amigo mío, está soplando en el viento”, como reza la canción. Versos inspiradores para jóvenes artistas como Coco Dávez, que se ha sumado a Gunter Gallery con una serigrafía homenaje al músico americano.

“Dylan marcó mi adolescencia, sus letras y su estética fueron ganándome a ritmos simultáneos”, afirma la artista. Y por eso hemos querido que se presente ante todos vosotros, de nuestra mano, con esa pieza sobre el cantautor que un día dijo de sí mismo que “Ni tengo una voz bonita ni canto bonito ni quiero hacerlo". Y sabemos que no le hace falta.

Coco Dávez es el nombre artístico de una pintora, Valeria Palmeiro (Madrid, 1989), que bebe del arte pop y del nuevo realismo ilustrado. Con una carrera meteórica, ha creado su propia marca con su última colección, Faceless, que ya ha expuesto en ciudades como Madrid, Lisboa o Santiago de Chile. De esta primera serie es esta pieza sobre Bob Dylan. Su sencillez de líneas, su pureza sentimental tras el pincel, su trabajo del color y su delicadeza de pintar rostros sin rostro, bien vale un acorde del mago surrealista de Minnesota.

¡Un hurra por Bob Dylan! ¡Un hurra por Coco Dávez!

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